sábado, 20 de abril de 2013

La invasión de los "princesos"

Hace algunos días comenzaron a publicarse imágenes como la que ilustra la nota, en la que presuntamente un varón sufre por una mujer que lo maltrata.

A simple vista parece una broma, un juego en donde se usa el sentido del humor para ridiculizar a las mujeres que se dicen princesas. ¿Pero por qué?

De entrada pienso que es pertinente hacer dos distinciones elementales:

1.- No es lo mismo ser feminista y luchar por relaciones de pareja equitativas libres de violencia, a decirse frívolamente "Princesa" y asumir que por autonombrarse así, un hombre no debe maltratarnos. El término princesa es derivado de la monarquía, en donde no está permitido ningún tipo de igualdad. En una relación de princesa-plebeyo, ella manda. En una relación de princesa-rey/reina/príncipe, ella obedece. Es tonto e ilógico que una feminista se llame a sí misma una princesa. La postura de defenderse de un maltrato asumiéndose princesa es superficial y desinformado. Como broma ayuda, para elevar la autoestima de una amiga con ánimo decaído, ayuda, pero no para defender sus derechos como mujer. Eso ya es ridículo.

2.- Sabemos que también existe el maltrato ejercido por las mujeres hacia sus parejas heterosexuales. Ojo que aquí no estamos haciendo distinción de parejas mujer-mujer, hombre-hombre, porque es bien sabido que los roles masculino/femenino, activo/pasivo que debieran desaparecer de la faz de la tierra para darle cabida a una verdadera equidad, se siguen dando tanto en parejas mujer-hombre, como en parejas homosexuales. El caso es que no es suficiente "voltear la tortilla" usando la broma del "Princeso" para demandar o hacer visible ese maltrato que también existe. De hecho el maltrato de las mujeres hacia los hombres parecería ser igual o más violento que el de ellos hacia nosotras. Las actitudes pasivo-agresivas, el chantaje, el embarazo intencional, la posesividad y exceso de control, así como la violencia psicológica y física son recursos utilizados para hacer menos a un hombre o vengarse del maltrato de algún otro. No obstante, sigue siendo mucho menor.

La violencia ejercida por la pareja se vuelve tan común e invisible, que parece normalizarse en el interior de la relación, aunque a todas luces las personas que miran la dinámica desde fuera, noten que hay algo que anda mal. Y si una mujer siente vergüenza reconocer que está siendo abusada y maltratada por un hombre que supuestamente la ama, el hombre tiene mucho más miedo y vergüenza para denunciarlo o hacerlo público. Por eso incluso las leyes parecieran favorecer el maltrato a los hombres como alguien me comentó por ahí... porque es vergonzoso, casi inconcebible.

Sin embargo, concediendo que los golpes, daños psicológicos y hasta los asesinatos pasionales de mujeres a hombres tuvieran la misma importancia en números que los de hombres a mujeres (lo cual no es cierto), estamos en un mundo de hombres en el que ellos siguen teniendo infinidad de ventajas sobre nosotras. La violencia que sufrimos va desde la poca libertad que tenemos de salir a la calle con determinada ropa, el menor sueldo al que aspiramos por el simple hecho de tener el sexo que tenemos, la cosificación de nuestros cuerpos utilizados como adorno o entretenimiento y la libertad que tienen ellos de decirnos cosas obscenas al oído o toquetearnos aunque vayamos vestidas como monjas.

¿Por qué da tanta risa que un hombre se asuma como "Princeso"? Bueno, en primer lugar porque es ridículo, suena absurdo utilizar un término que no existe.

En segundo lugar, porque el movimiento humorístico de "los princesos" encierra esa perversa permisividad de burlarse de lo femenino. Encontré una imagen que rudamente decía que el princeso era una mezcla de un metrosexual, una princesa Disney y un "maricón"(sic). La lectura es: una mezcla entre frivolidad masculina, más frivolidad femenina más lo masculino feminizado. Suena lógico.

¿Qué influencia tienen las Princesas Disney en la educación de nuestros hijos e hijas? Ya lo comentaba un poco en el post anterior cuando hablaba de las Barbies. Fíjense en la mayoría de los padres de familia nombrar a sus criaturas: ellas son "princesa" ¿y ellos? "campeón". Siempre me fastidió decirles así a los niños y a las niñas, ¿por qué? Eso predispone, infancia es destino en muchos aspectos.

Crecemos sintiéndonos princesas de la monarquía: inseguras, vanidosas, frágiles, caprichosas. No asumimos nuestra responsabilidad de formar en nosotras mismas todo lo que exigimos que tengan ellos: fuerza, independencia, sentido del humor, seguridad, temple. ¿Por qué esperamos que esas sean sólo cualidades de un supuesto "príncipe" o "caballero"?

Dejemos de decir tonterías y asumamos que somos personas sin pesadas etiquetas que nunca nadie nos explica ni nos detenemos a pensar qué significan.

Este juego llega a ser una burla discriminatoria hacia el universo de lo femenino relacionándolo con lo estúpido. Es decir, ser mujer=ser estúpida.

Es una postura feminizada de lo masculino, pero sin llegar a asumirse ni homosexual ni mandilón ("las grandes vergüenzas nacionales"), pero tampoco desde una postura de denuncia, se queda en broma que puede hacer reír o llorar a quienes padecen situaciones violentas pero le mete un empujón de reversa a la lucha por los derechos de las mujeres a una vida libre de violencia.


  • La violencia hacia las mujeres es MÁS importante que hacia los hombres por esta sencilla razón: culturalmente es NORMAL. 
  • Se llama "Violencia de Género" cuando hablamos de violencia hacia MUJERES, no hacia hombres porque cuando una mujer maltrata a un hombre no es por ser hombre, sino por "poco hombre". Cuando se le maltrata a la mujer está justificado hacerlo "porque es mujer".
  • No se vale hacer como si fueran igual de importantes. Humanamente vale igual la vida de una mujer que la de un hombre, pero cultural y socialmente la vida de un hombre vale más. Y no sólo en nuestro país sino en gran parte del resto del mundo. 
    Sé que parece una exageración... y ojalá lo fuera.


11 comentarios:

  1. Interesante post. Tanto que la respuesta que pensé resultó tan larga que mejor la publiqué como post en mi blog: Princesos: humor, violencia y género.

    Saludos.

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  2. Es solamente una broma que no se por que se lo toman muy en serio, pero eso de que es mas importante la violencia de la mujer denota que son solo feministas espantadas..

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  3. Ah, era broma? Jajajajajajajajajaja!!!!! Apenas voy entendiendo el chiste!! No puedo parar de reír!! Qué alivio!!! Decía mi abuela que entre broma y broma la verdad se asoma. Feminista sí, orgullosamente. ¿Espantada? ¿Tendría por qué estarlo? Usted es un /a cobarde anónimo/a desinformado/a más bien.

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  4. wow, muy interesante, de verdad estoy de acuerdo u.u'
    y si es una broma, pero en lo personal, me parece una broma ridicula ¬¬'.

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  5. Las facultades humanas de cualquier índole no importan del género siempre y cuando los roles sociales no se supediten a roles de género; tal caso, no existe, pues, los roles sociales van directamente ligados con roles categorizados de género. El obejtivo primero es cumplirlo ¿no, es así? entonces, dejemos de hablar de valentia, fuerza, independencia, sentido del humor, seguridad, temple como cualidades éticas masculina o como fragilidad, inseguridad debilidad como cualidades éticas femininas. Son posibles en la medidad que son humanas, son para la interacción humana; las valoraciones morales no distinguen género, o al menos no deben hacerlo. ¡hagámoslo! La condición de género no va más allá de eso.

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  6. Muy interesante, concuerdo con lo dicho a excepción de lo último donde de cierta manera se justifica o explica (no se como llamarlo) el maltrato mujer-hombre, creo que no se reduce a eso la razón asi como que los hombres maltratan a las mujeres solo por serlo, creo que hay mucho tras de eso y es muy adelantada la idea de categorizarlo así. Saludos :)

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  7. Honestamente me escandalizan las afirmaciones al final, se pierde toda afirmación a la "EQUIDAD DE GÉNERO".
    De igual forma "poco hombre" es una noción cultural que apela a estereotipos de género, ¿no creen que igual hay hombres que sufren por dichos estereotipos o por estar a la altura de lo que se espera del hombre?
    Falta documentarse sobre violencia de género.
    Afirmar que cierta situación es más valiosa que la de otro ser nos aleja de una perspectiva más inclusiva y de la verdadera construcción de la otredad. Cuidado con legitimizar prácticas que no benefician en nada a nuestra sociedad y si dañan seres humanos.

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  8. Gracias por leer y comentar... e interpretar. Respeto sus interpretaciones aunque no las comparto. Siempre soy cuidadosa y responsable con lo que digo, por eso no pienso discutirlo más. Sé que no puede categorizarse a la ligera pero hago uso del derecho de libertad de expresión que tengo en este blog y si escribo sobre el tema es porque conozco, no soy improvisada. No justifico ningún tipo de violencia y si uso las comillas es por una razón. No estoy usando "poco hombre" como un concepto personal. Les invito a no leer a la ligera... riesgos de la blogósfera.

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  9. Mira lo que me encontré: http://princesossomos.blogspot.mx/2013/04/porque-princesos.html

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  10. Lo he leído pero no estoy de acuerdo en absoluto. Ni en que sea "humor" para ridiculizar a las mujeres (lo que ya sería, como dices, lo bastante grave) ni en que el maltrato de mujeres a hombres sea igual o más violento ¿tú has visto las estadísticas? ¿sabes cuán diferente son las causas? Esa es una estrategia neomachista que se basa en decir que no solo exageramos cuando hablamos de violencia sino que la infligimos en la misma cantidad y por las mismas causas. Creo que hacerlo pasar como un malentendido o una broma de mal gusto es muy peligroso. No digo que no existan mujeres que agredan, ojo, sino que equipararlas a los hombres que agreden es contribuir a saber en qué se diferencia la violencia machista de otras violencias. No es que sea más importante (todas las violencias lo son) es que es diferente: distintas causas, distintos modos, distintas consecuencias, distintos números también. Sé que la intención del artículo es buena, pero mezclar dos cosas tan distintas solo minimiza la más importante, es como si para hablar del calentamiento global y de cómo se calienta el motos de tu coche usaras el mismo artículo ¿qué harías, poner de relieve el calentamiento global o elevar a universal la anécdota? Es mi opinión nada más, desde luego, no pretendo deslegitimar tu postura, solo expresar mid esacuerdo. Abrazos.

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